Y por qué no?

Hablar del cambio por intención y por obligación donde el primero necesita de ver un sentido para ser ejercido.

Una de las balanzas de la moral es tener la responsabilidad de gestionar una empresa que es de tu propiedad y que de ella dependen familias, teniendo en el otro platillo todo lo que tiene que ver con el miedo al cambio, acudiendo al postureo y a culpar a todo y a todos menos a uno (los impuestos, malos competidores que actúan sin escrúpulos para vender más, y ahora la IA que nos va a quitar el trabajo a todos)

Pensar que el conocimiento vertical es suficiente desatendiendo el transversal es lo que mantiene a muchas empresas en un nicho estancado, arcaico, reticente al cambio y dañino para el sector en sí al afectar al valor medio del mismo por no ser capaces de mantener el ritmo.

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